Según advierten desde la Dirección General de Tráfico (DGT), la velocidad excesiva es, junto con las distracciones y el consumo de alcohol y drogas, una de las principales causas de siniestralidad vial. Ello es así porque no permite controlar un vehículo en situaciones críticas.
Cuanto mayor sea la velocidad, mayor será el riesgo
La probabilidad de fallecer o sufrir lesiones graves permanentes es mucho mayor en un accidente con velocidad excesiva. Para alertarnos del peligro que supone superar los límites establecidos, la DGT, a través de su manual La velocidad, pone un ejemplo de lo más ilustrativo: si colisionamos contra un objeto rígido, el impacto puede compararse a saltar con nuestro vehículo desde la planta de un edificio. De esta forma:
- Una colisión a 50 km/h equivale a caer desde un tercer piso.
- Una colisión a 120 km/h es similar a caer desde el piso 14.
- Una colisión a 180 km/h tiene las mismas consecuencias que caer desde el piso 36.
Del mismo modo, el exceso de velocidad puede ocasionar daños muy graves a terceros. Por ejemplo, a los peatones. De ahí que se haya reducido el límite en algunas vías urbanas a 30 km/h. Pero, ¿cómo afecta la velocidad en la mortalidad de este colectivo? Según el citado manual de la DGT:
- A 30 km/h, se calcula que solo el 5% de los peatones atropellados podría fallecer a consecuencia del accidente.
- A 50 km/h, el porcentaje de viandantes fallecidos se aproximaría al 50%. Y en el caso de sobrevivir al atropello, la probabilidad de causarle una discapacidad a un peatón sería muy elevada.
- Finalmente, a partir de 80 km/h el atropello sería fatal y ningún peatón sobreviviría debido a las lesiones sufridas.
Y por la misma regla de tres, cuanto mayor sea la velocidad, más tiempo tardaremos en detener el vehículo. Ello es así porque la velocidad excesiva afecta a nuestra capacidad de reacción ante posibles obstáculos.
Si a ello le sumamos un firme en mal estado, condiciones atmosféricas adversas, un mantenimiento precario del vehículo y factores como la fatiga, el sueño o el alcohol y las drogas, las consecuencias pueden ser muy negativas.
¿Cómo influye la velocidad excesiva en los conductores?
Como se ha comentado en el apartado anterior, el exceso de velocidad afecta a la capacidad de reacción de los conductores. De manera especial, altera su campo de visión, potenciando así una serie de factores de riesgo:
- Una velocidad excesiva provoca el denominado efecto túnel, que reduce significativamente la percepción de cuanto sucede a nuestro alrededor e impide apreciar cualquier peligro en los márgenes de la vía.
- De manera especial, esa menor capacidad de visión periférica es muy peligrosa en las intersecciones. Y también nos limitará para ver y analizar lo que suceda en el entorno (señales de tráfico, peatones, otros vehículos, etc.).
- Como ejemplo de relación entre exceso de velocidad y reducción del campo de visión, al circular a una velocidad de 80 km/h se estima que perdemos un 35% de la eficacia visual.
Finalmente, como ha quedado expuesto anteriormente, la velocidad excesiva dificulta la capacidad de anticipación, acelera la aparición de la fatiga, aumenta las probabilidades de sufrir una distracción y también puede provocar agresividad.
Límites de velocidad en carretera y sanciones por superarlos
Para los automóviles y las motocicletas, el límite de velocidad establecido por la DGT en carreteras convencionales es de 90 km/h. Y por lo que respecta a autovías y autopistas, el límite es de 120 km/h.
En la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, la velocidad excesiva es considerada una infracción grave y cuenta con un régimen sancionador específico. El mismo contempla:
- Multas que oscilan entre 100 y 600 euros.
- La retirada de entre dos y seis puntos del permiso de conducción.
Asimismo, se considera delito contra la seguridad vial cuando se superan los límites de velocidad en 60 y 80 km/h en vías urbanas e interurbanas, respectivamente. En dichos supuestos, el Código Penal castiga a los conductores con penas de prisión, multas o trabajos en beneficio de la comunidad y la retirada del carné de conducir.
5 de abril de 2024. Por Redacción Mobilitynews: Fotos: Pixabay / Lucas Pezeta / Taras Makarenko.