Pasamos muchas horas en el coche: camino al trabajo, en viajes largos o atrapados en atascos interminables. Y aunque no siempre lo notamos, esa rutina diaria puede pasar factura a nuestra columna. Cuidar tu espalda al volante no es sólo una cuestión de comodidad, sino de salud a largo plazo.
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Al respecto, los fisioterapeutas advierten que una mala postura al conducir puede provocar dolores lumbares y cervicales e incluso lesiones crónicas si no se corrige a tiempo. Por ello, a continuación te explicamos qué puedes hacer, según los expertos, para proteger tu espalda cada vez que te sientas al volante.
¿Por qué duele la espalda al conducir?
Conducir durante periodos prolongados implica mantener una posición estática con vibraciones constantes, estrés postural y, muchas veces, una mala ergonomía del asiento. Todo ello contribuye a la sobrecarga de la musculatura de la espalda, especialmente la zona lumbar.
En este sentido, se estima que en torno al 80% de los conductores sufre alguna molestia lumbar ocasional. Las causas principales incluyen:
- Posiciones incorrectas del respaldo o del volante.
- Falta de pausas para estirar el cuerpo.
- Tensión acumulada por el estrés del tráfico.
- Asientos que no ofrecen el soporte adecuado.
Consejos para cuidar tu espalda al volante
Por lo expuesto, es importante que pongas en práctica los siguientes consejos para cuidar tu espalda al volante:
Ajusta correctamente el asiento
El respaldo debe estar ligeramente inclinado hacia atrás (entre 100 y 110 grados), con la espalda bien apoyada. Y la cadera tiene que quedar al mismo nivel o un poco por encima de las rodillas.
Mantén el volante a una distancia adecuada
Evita estirar los brazos por completo. Los codos han de estar flexionados a unos 120 grados, lo que permite una mejor maniobrabilidad sin tensar los hombros ni la espalda.
Apoya la zona lumbar
Si tu coche no tiene soporte lumbar regulable, puedes usar un cojín ortopédico o una toalla enrollada. Este gesto sencillo ayuda a cuidar tu espalda al volante, de manera especial en trayectos largos.
No guardes objetos en los bolsillos traseros
Llevar la cartera en el bolsillo trasero del pantalón puede desalinear la pelvis, provocando tensiones musculares. Retírala antes de sentarte a conducir.
Haz paradas cada dos horas
Estira las piernas, camina un poco y realiza movimientos de rotación suave del tronco. Esto mejora la circulación y libera la musculatura sobrecargada.
Mantén ambos pies apoyados
Evita dejar un pie colgando en reposo, ya que esto desequilibra la pelvis. Cuando no uses el embrague, mantén ambos pies firmes y en el suelo o reposapiés.
Revisa la ergonomía del vehículo
En coches antiguos, los asientos pueden carecer de ajustes precisos. Si conduces mucho, valora invertir en un cojín lumbar o fundas ergonómicas.
¿Cómo influye el estrés al volante?
Estar en tensión constante mientras se conduce no sólo afecta al sistema nervioso, sino también a la musculatura. El estrés incrementa la rigidez en cuello, hombros y espalda. Practicar respiraciones profundas y técnicas de relajación puede ser tan importante como ajustar el asiento.
Preguntas frecuentes
La postura ideal es con la espalda completamente apoyada en el respaldo, que debe estar inclinado entre 100 y 110 grados. Los codos deben mantenerse ligeramente flexionados y las rodillas al mismo nivel o un poco por debajo de la cadera.
Lo recomendable es hacer una pausa cada dos horas. Durante ese descanso conviene caminar un poco, estirar el cuerpo y movilizar la zona lumbar para prevenir sobrecargas musculares.
Sí. El estrés provoca tensión muscular en cuello, hombros y espalda, lo que puede aumentar el malestar durante la conducción. Técnicas como la respiración profunda o la atención plena ayudan a reducir esa tensión.
16 de junio de 2025. Por Redacción Mobilitynews. Foto: Alex P (Pexels).